Los comandantes traicionados por Fidel Castro.

          Cuando niño, en mi pueblo Media Luna, tenía que pasar todos los días con mi maestra y varios niños más, por el lado de las naves que servían de almacenes de azúcar del ingenio. En el frente había una “cuatro bocas” y en el techo de zinc escrito con letras enormes aquella frase firmada por Fidel, que nunca olvidaré. “Quien traiciona al pueblo traiciona a Cristo”. Y ahora el infeliz de Evo Morales, como mal aprendiz, cacarea. "Quien traiciona a un pobre, traiciona a Cristo". Todos sabemos que Fidel, no sólo traicionó al pueblo y a Cristo, primero traicionó a sus propios comandantes.

            Arriba, en la secuencia de fotos, el comandante Pedro Luis Díaz Lanz (La Habana, Cuba 8 de julio de 1926 - Miami 26 de agosto de 2008, Jefe de la Fuerza Aérea Revolucionaria de Cuba y piloto de Fidel Castro, después de la Revolución Cubana en 1959, fue el el primer comandante disidente, le sigue el comandante William Alexander Morgan Ruderth, (Cleveland, Ohio, Estados Unidos, 19 de abril de 1928 - Cuba, 11 de marzo de 1961), fue un militar y guerrillero estadounidense, participante en la Revolución Cubana en sus primeros años, era conocido como el ¨Comandante Yankee¨ y declarado “Héroe de la Revolución Cubana”, terminó fusilado por sus compañeros de lucha. En el extremo, el comandante Huber Matos. (Yara, 26 de noviembre de 1918 - Miami, 27 de febrero de 2014), cumplió veinte años de cárcel y aparece junto a Almeida, y el comandante Camilo Cienfuegos, (La Habana, 6 de febrero de 1932 - quien desapareció misteriosamente en el mar Caribe, el 28 de octubre de 1959), a pesar de estar advertido por Matos. En el centro de la secuencia, Fidel junto al tristemente célebre comandante de origen español, Eloy Gutiérrez Menoyo, (Madrid, 8 de diciembre de 1934 - La Habana, Cuba, 26 de octubre de 2012), cumplió casi veintidós años de prisión en Cuba y luego de jugar con el exilio de Miami, en el 2003 regresó para vivir en La Habana, seguido del comandante William Morgan. La foto que le sigue se repite, sólo tomada desde otro ángulo. Abajo, el comandante Rolando Cubela Secades, (Cienfuegos, Cuba, 1932), fue condenado a treinta años de cárcel, pero liberado en 1979, al lado derecho del comandante Ernesto Che Guevara, (Rosario, 14 de junio de 19281 ​- La Higuera, 9 de octubre de 1967), abandonado a su suerte en Bolivia, junto al grupo de guerrilleros que comandaba, según “Benigno” (1)

Fuente: Wikipedia.

(1) Memorias de un soldado cubano. “Benigno” Dariel Alarcón Ramírez. FÁBULA TUSQUETS EDITORES. 1996.

Benigno no es de fiar.

La periodista María Polo Vega, del Instituto Cubano de Radio y Televisión me posteó el escrito que inserté arriba, señalándome que el guerrillero “Benigno” no era de fiar. Quiero señalar que “Benigno” murió en el 2016. Revisé todos mis escritos y en ninguno me dirigí a alguien pidiendo que confiara en “Benigno”. Creo María que ese “consejo” debiste dárselo a quienes lo reclutaron en la Sierra Maestra, a Camilo Cienfuegos por hacerlo miembro de su Columna, al que lo nombró Capitán, jefe de la Policía Militar de La Habana, al comandante del Ejército Rebelde y General de División de las FAR, Efigenio Ameijeira, que fue su jefe en la guerra de Argelia, al Che que lo escogió como escolta para viajar por el mundo, y combatió con “Benigno” en el Congo y Bolivia, a Fidel Castro, que ya muerto el Che, volvió enviarlo a Bolivia para continuar la lucha (o para quitárselo de arriba) y luego de regresar vivo por segunda ocasión, lo enviara combatir a Angola, al que lo ascendió a Coronel del MININT, a Fidel nuevamente por permitir que el hombre de no fiar, formara parte de la Contrainteligencia e integrara el Batallón de su Seguridad, y que dirigiera la Fuerza de Trabajo en las cárceles de la Habana. Discúlpame si cambié el orden. ¿Debo desconfiar de ese hombre porque un día se cansó de ver tanta porquería y se asiló en Francia?¿quién te dijo que yo confiaba en él? ¿Y me pregunto porqué confiar en ti, por el solo hecho de ser del Cerro Pelado y tus abuelos haber tenido a su hermana Dania como criada en su casa? Verdaderamente, ¿cuál es tu preocupación, o miedo, “Benigno”, o lo que escribió “Benigno” el traidor? A mí también me dijeron “traidor” cuando me quitaron las esposas en el avión y obligaron a salir de Cuba, ya cumplí diecisiete años sin volver a mi país, donde mis hijas eran niñas y ahora son madres. Maldito aquél que confíe en el hombre.

“Los tiempos de Venancio no dejan de ser hipócritas“

Autor. Ivo Basterrechea Sosa.

Miguel Díaz-Canel y Bruno Rodríguez, en el balance anual del MINREX.
Díaz-Canel: "No podemos desconocer a los cubanos que viven en el exterior orgullosos y nostálgicos de su patria". Twitter.
Venancio como cambian los tiempos. En otro momento de la afligida y farsante historia patriotera de Cuba, esta conversación a “nivel de pasillo” le hubiera costado el puesto a ambos por conspiración. Por cosas menores que esa, muchos cubanos de a pie fueron tratados de traidores y gusanos, y peor aún sufrieron años de cárcel. Me recuerda, siendo yo niño, a un vecino de mi pueblo Media Luna, creo que su nombre era Lilo Reyes, cuando salió el billete de Martí, con la imagen corrida hacia un lado dijo una frase como esta “En la próxima tirada, la foto de Martí no vuelve a salir”. Creo que fue más o menos así, que alguien me corrija. La broma le costó dos años de cárcel.

“La buena Yeyé”.*

En la secuencia, arriba Haidée Santamaría Cuadrado, que se pegó el tiro de la vianda al verse acorralada por el “demonio” de su esposo Armando Hart (A su lado). En el centro Haidée en la Sierra Maestra, luego con sus dos hijos Celia y Abel. Su hija Celia, ya adulta. Abajo Silvio, Noel Nicola y Pablo Milanés. Después una foto de Silvio, y otra de Pablo.

El coronel Dariel “Benigno” Alarcón, denunció en su libro. **

“Tanto con Haydée como con su marido, Armando Hart, yo llevé unas relaciones muy íntimas cuando, en 1968, vivíamos una casa al lado de la otra en Siboney, en la Calle 182 entre la Avenida 3 y la 5. Daba la casualidad de que quedábamos los únicos vecinos allí, ellos y yo con mi mujer. Entonces es cuando algunos revolucionarios comenzaron a hablar de Haydée, a hacer conjeturas sobre ella y a lanzar rumores sobre la vida de privilegios que llevaba.

Es cierto que Haydée demostraba tener un nivel de vida por encima del de los demás, hasta el punto de tener tres criadas, dos chóferes y un tercero para buscar los víveres de la casa. También alimentaba cuatro o cinco niños del barrio que iban a la casa a jugar con sus hijos —les regalaba juguetes y todo tipo de alimentos—, más una cantidad de hijos de guerrilleros latinoamericanos que habían muerto en combate o estaban en la guerrilla en sus países. Buscó a un ingeniero y a un arquitecto para que, en el patio, le hicieran una casa de juguetes para su hija, Celia María, una réplica de la casa donde ella había nacido, que llenó de juguetes que hizo traer de Europa.”

“Había puesto a su hermana Aída al frente de lo que en Cuba se llamaba Recuperaciones de Valores del Estado: esto le permitía sacar todos los muebles, electrodomésticos, etcétera, que allí se encontraban y hacer regalos de juegos de muebles, o vajillas de loza fina, a distintas amistades. A mí mismo me regaló una vajilla completa, con bandejas de plata y jarrones de plata también. A Pablito Milanés, Silvio Rodríguez y Noel Nicola, tres cantautores surgidos de la llamada «canción protesta», les entregó casas en repartos residenciales, completamente amuebladas. Debo aclarar que éstos habían sido víctimas del sectarismo desencadenado en la televisión y ella los protegió. Ella era muy amiga de los artistas, y siempre se opuso al sectarismo en la cultura.” (1)

* Yeyé le decían a Haidée Santamaría, que se suicidó entre otras cosas por su relación tormentosa con su marido Armando Hart Dávalos. Se cree que sus dos hijos Celia y Abel Hart Santamaría, se suicidaron en un accidente de tránsito en el 2008.

** Dariel Alarcón Ramírez. “Benigno” fue uno de los tres cubanos sobrevivientes de la guerrilla del Che en Bolivia, junto a Harry Antonio Villegas Tamayo, “Pombo” y Leonardo Tamayo “Urbano”.

Dariel Alarcón Ramírez. “Benigno”. Combatiente de la Sierra Maestra. Capitán, jefe de la Policía Militar de La Habana. Como escolta del Che, viajó por el mundo. Combatió en Argelia, bajo el mando de Efigenio Ameijeira. Combatió en el Congo y Bolivia, bajo las órdenes del Che. Muerto el Che, llegó a La Habana y lo volvieron mandar a combatir en Bolivia. Combatió en Angola. Lo ascendieron a Coronel. Trabajó en la Contrainteligencia. Integró el Batallón de Seguridad de Fidel Castro. Dirigió la Fuerza de Trabajo en las prisiones de la Habana. Se exilió en 1996 y en el 2016, murió en  Francia.

Bibliografía:

(1) Memorias de un soldado cubano. “Benigno” Dariel Alarcón Ramírez. FÁBULA TUSQUETS EDITORES. 1996. Pág. 45, 46 y 47.

La primera esposa de Fidel Castro.

Mirta Francisca de la Caridad Díaz-Balart y Gutiérrez, la primera esposa de Fidel Castro Ruz, y hermana de Rafael Lincoln Díaz-Balart y Gutiérrez, líder mayoritario de la Cámara de Representantes de Cuba y Subsecretario del Interior durante la presidencia de Fulgencio Batista, que a la vez fue el padre de los congresistas Lincoln Díaz-Balart, Mario Díaz-Balart y el periodista de Telemundo José Díaz-Balart. Fidel y Mirta se casaron el 11 de octubre de 1948, pasando la luna de miel en Miami y Nueva York y se divorciaron siete años después (mientras Castro estaba en el exilio) en 1955. En 1949 tuvieron un hijo, Fidel Ángel "Fidelito" Castro Díaz-Balart, que en el 2018, se pegó el tiro de la vianda al verse acorralado por “los demonios” de su padre.

Arriba en la secuencia de fotos, la boda de Fidel y Mirta, a la derecha Rafael Lincoln Díaz-Balart y Gutiérrez. En la parte central Fidel, Mirta y Fidelito (niño). Abajo de izquierda a derecha, Lincoln Díaz-Balart, Mario Díaz-Balart y el periodista de Telemundo José Díaz-Balart, al lado su primo Fidel Ángel "Fidelito" Castro Díaz-Balart.

Fuente: Wikipedia (Traducción del inglés)

El monumento a José Martí.

En 1953, cuando en el gobierno del dictador Batista se construía el Monumento al “autor intelectual del Moncada” José Martí, el destructor material de Cuba comandaba un grupo de jóvenes “inferiores en número y armas” enviándolo hacia una muerte segura, tal y como ocurrió, y después en su alegato tratara de criminales al ejercito de Batista, nos preguntamos ¿Al atacar la segunda fortaleza militar del país, acaso esperaba recibir ramos de flores? ¿Por qué él y su hermano no se inmolaron en la bandera, como le exigieron a miles de “combatientes internacionalistas”, como se lo pidieron a Pedro Tortoló Comas y a un grupo de constructores civiles en Granada? Siempre el plan de fuga, vaya usted a saber si había un plan para sus seguidores y otro, el más seguro para él y su hermanito ¡Qué casualidad, que no se pegaron el “tiro de la vianda” cuando cayeron prisioneros, como lo hizo el General Calixto García! Así de grande habrá sido su carrera para esconderse en las montañas de la Sierra Maestra.